Especialistas en derecho aduanero advierten sobre una renovada vocación de avanzar en la composición del Tribunal Fiscal de la Nación (TFN), reduciendo la participación de abogados en las salas aduaneras, en favor de profesionales de Ciencias Económicas.
El TFN es un organismo autárquico que funciona en el Ministerio de Economía, cuyo rasgo distintivo y excluyente es la especialización de sus salas y vocales (jueces) en impuestos y en temas aduaneros. Es precisamente allí donde se dirimen los cuestionamientos y recursos interpuestos por los contribuyentes en reclamos a normativas de la AFIP, en rigor, a sus direcciones generales Impositiva y Aduanera. Se trata de un proyecto de ley girado a la Dirección Nacional de Impuestos, del Ministerio de Economía, por pedido de la Subsecretaría de Ingresos Públicos. Allí se señala que el propio Tribunal Fiscal de la Nación impulsa su modificación para lograr una mayor “eficiencia y eficacia” en el organismo, “aggiornando su funcionamiento” con “el uso de las tecnologías en el procedimiento” y “con miras a reducir los plazos procesales”, entre otros aspectos.
Acuerdo de vocales
Fuentes especializadas consultadas, y con conocimiento del funcionamiento y avatares históricos del TFN, manifestaron su duda respecto del acuerdo de los vocales del TFN respecto de esta iniciativa que modifica varias leyes -entre ellas, el propio Código Aduanero- inclinándose por la interpretación que sugiere “intereses personales y vocación política” en la revisión del organismo.
En la actualidad, el TFN está compuesto por 7 salas: 4 que entienden en cuestiones fiscales y 3 en temas aduaneros. La primera modificación que se pretende es que la totalidad de las salas abandonen su especialización para entender “indistintamente” en ambas cuestiones. La pérdida de la especialización aduanera exclusiva se completa con la modificación en la composición de cada sala: actualmente, las salas impositivas se integran por 2 abogados y 1 contador, mientras que las salas aduaneras, por su especificidad, se integran por 3 abogados, versados en derecho aduanero. El proyecto prevé que las 7 salas estén igualmente compuestas por 2 abogados y 1 contador.
Rechazo formal
El Instituto Argentino de Estudios Aduaneros (IAEA) se manifestó al respecto, y rechazó la confluencia en una única competencia tributaria y aduanera de la totalidad de las salas, así como de la composición idéntica de dos abogados y un contador público para cada una de ellas. “El derecho aduanero y la práctica aduanera general resultan autónomos del derecho tributario”, indica el texto del IAEA, que lleva la firma de su presidente, Facundo Sarrabayrouse, y la secretaria Stella Maris Ruíz.
“En los procedimientos aduaneros no se trata simplemente de verificar la existencia de un hecho imponible sino, esencialmente, de resolver si la Aduana ha actuado en el marco de sus atribuciones y ha hecho una correcta aplicación -en cada caso concreto- de los distintos tratados internacionales, acuerdos, leyes, normas, regímenes e institutos que regulan el comercio exterior”, ampliaron.
Asuntos específicos
Y argumentan que los vocales del TFN deben “conocer y decidir sobre asuntos específicamente aduaneros”, cuestiones “que no tienen nada que ver con la materia impositiva y que exceden holgadamente la incumbencia de los profesionales en Ciencias Económicas” tales como:
- La clasificación arancelaria de las mercaderías, su valoración en aduana y la determinación de su origen
- Regímenes de las destinaciones aduaneras de importación (importación para consumo, importación temporaria, tránsito de importación y depósito de almacenamiento) y de exportación (exportación para consumo, exportación temporaria, tránsito de exportación y removido)
- Sobre la aplicación de prohibiciones de naturaleza económica y no económica a las importaciones y exportaciones
- Sobre la comisión de ilícitos aduaneros (declaraciones inexactas, mercadería a bordo sin declarar, trasgresión de las obligaciones impuestas como condición de un beneficio; transgresiones a los regímenes de destinación suspensiva, de equipaje, pacotilla y franquicias diplomáticas, de envíos postales, tenencia injustificada de mercadería de origen extranjero con fines comerciales o industriales, el contrabando menor)
- Sobre regímenes especiales aduaneros (medios de transporte, contenedores, equipaje, rancho, pacotilla, tráfico fronterizo, reimportación)
“La reforma que se propone no encuentra justificación en el mejoramiento del servicio de justicia en favor de los particulares, sino que bajo ese ropaje termina recogiendo la aspiración de los profesionales de ciencias económicas de extender su incumbencia a un área que tradicionalmente estuvo atendida de manera adecuada por los profesionales del derecho. Por ende, en este aspecto el proyecto de reforma carece de toda razonabilidad”, manifestaron los abogados, tras recordar “iguales intentos de reforma” que sucedieron en 1998, 2002 y 2017.
Opiniones
Un especialista en derecho aduanero y miembro de la comisión redactora del Código Aduanero, advirtió que el proyecto “es un grave error” porque como las salas trabajarán en los mismos temas, obligará a que los vocales abogados sepan de impuestos y los vocales contadores entiendan en cuestiones aduaneras.
“El Código Aduanero, en su artículo 1034 establece que para litigar en materia aduanera en el TFN será obligatorio el patrocinio letrado, es decir, estar inscripto en la matrícula de la Justicia Federal”, explicó.
En la búsqueda de la mayor celeridad procesal, la modificación introduce la posibilidad de declarar la caducidad de la instancia, lo que “va en contra del principio de defensa, que debe buscar la verdad objetiva en las decisiones del TFN. Establecer la caducidad o aprensión de la instancia es peligroso porque no se busca la verdad sino lo que surja del balance de las diligencias”, apuntó la fuente consultada.
Un ex vocal y ex presidente del TFN adhirió a la presentación del IAEA y rechazó el proyecto de modificación. “He podido comprobar que lo que distingue y caracteriza al Tribunal es su especialización. De ninguna manera lo es el carácter multidisciplinario que se invoca para justificar la intervención de los contadores públicos en materia aduanera. Y si alguna importancia tienen esas variadas disciplinas que concurren, estas deben hallarse dentro de la propia materia aduanera, con los operadores del comercio internacional, como lo son los despachantes de aduana”, señaló.
“La especialización garantiza el conocimiento del que debe decidir en la contienda y ello constituye una garantía para el administrado, pues al entender de la materia de que se trata el llamado a dictar sentencia administrará justicia con conocimiento de causa. Las notorias diferencias existentes entre en la materias relativas a la tributación interna y de las que hacen al derecho aduanero justifican plenamente la existencia de Salas distintas para conocer de las causas sometidas a su jurisdicción”, abonó el ex funcionario.
FUENTE:
www.tradenews.com.ar